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Acabo de terminar “El príncipe” de Maquiavelo. Lectura recomendable a todos. Ayudará a entender cosas del presente, del pasado y del futuro. Aunque son conclusiones desde su punto de vista y filtrado por sus intereses propios, no dejan de ser conclusiones basadas en la experiencia personal, lo que le confiere especial valor (al menos para mi). Me ha llamado la atención muchísimo el hecho de ver reflejadas situaciones actuales en un libro que tiene 500 años (editado en 1513); en algunos casos, sólo había que cambiar nombres para darse cuenta de que la humanidad sigue igual ahora, que hace 500 años y que hace 1000 años.
La obra que tengo en mis manos, al estar comentada por Napoleón Bonaparte, le ha dado un morbo añadido inicial, aunque posteriormente he valorado más la obra y menos sus comentarios (sobre todo porque en muchas ocasiones sólo escribía líneas cortas como contestando a Maquiavelo). Sin embargo, gracias a ellos puedes acercarte a conocer a Napoleón y darte cuenta de la cantidad exuberante de ego que poseía, entre otras cosas.
“EL FACTOR HUMANO” de John Carlin. El libro sobre Mandela, el mundial de rugby y Sudáfrica en el que se inspiró la peli “Invictus”.
El libro está bastante bien (aunque lo de Mandela está exagerado) pero una vez leído, tengo 0 interés por la peli, que no había visto aún. Es imposible recrear lo que quiere explicar el libro.
Finalizada la trilogía MIllennium. Me ha gustado mucho y lo he pasado en grande. Novela negra muy entretenida con personajes tremendamente carismáticos.
“Los hombres que no amaban a las mujeres” es quizá el mas cerrado de los tres, con un objetivo muy claro. El caso que se presenta es cojonudo y es magnifica la presentación de los dos grandes protagonistas de la trilogía, el periodista Mikael Blomkvist y la hacker antisocial Lisbeth Salander.
“La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina” es mi favorito de los tres. Con una trama mas abierta y donde se profundiza muchísimo en todos los personajes.
“La reina en el palacio de las corrientes de aire” es un genial cierre, que sin embargo hace pedir mas.
Lástima la muerte de Stieg LarssonEdito solo para añadir que inicio “Cell” de Stephen KIng. Lo tenía por ahí perdido hace mucho y todo lo que cae en mis manos del señor King lo acabo leyendo.
Finalizada la trilogía MIllennium. Me ha gustado mucho y lo he pasado en grande. Novela negra muy entretenida con personajes tremendamente carismáticos.
“Los hombres que no amaban a las mujeres” es quizá el mas cerrado de los tres, con un objetivo muy claro. El caso que se presenta es cojonudo y es magnifica la presentación de los dos grandes protagonistas de la trilogía, el periodista Mikael Blomkvist y la hacker antisocial Lisbeth Salander.
“La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina” es mi favorito de los tres. Con una trama mas abierta y donde se profundiza muchísimo en todos los personajes.
“La reina en el palacio de las corrientes de aire” es un genial cierre, que sin embargo hace pedir mas.
Lástima la muerte de Stieg LarssonEdito solo para añadir que inicio “Cell” de Stephen KIng. Lo tenía por ahí perdido hace mucho y todo lo que cae en mis manos del señor King lo acabo leyendo.
Pues s
Finalizada la trilogía MIllennium. Me ha gustado mucho y lo he pasado en grande. Novela negra muy entretenida con personajes tremendamente carismáticos.
“Los hombres que no amaban a las mujeres” es quizá el mas cerrado de los tres, con un objetivo muy claro. El caso que se presenta es cojonudo y es magnifica la presentación de los dos grandes protagonistas de la trilogía, el periodista Mikael Blomkvist y la hacker antisocial Lisbeth Salander.
“La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina” es mi favorito de los tres. Con una trama mas abierta y donde se profundiza muchísimo en todos los personajes.
“La reina en el palacio de las corrientes de aire” es un genial cierre, que sin embargo hace pedir mas.
Lástima la muerte de Stieg LarssonEdito solo para añadir que inicio “Cell” de Stephen KIng. Lo tenía por ahí perdido hace mucho y todo lo que cae en mis manos del señor King lo acabo leyendo.
Pues sí, gran pena que muriese porque la mujer dijo que Stieg estaba trabajando en el cuarto.
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